miércoles, 18 de mayo de 2016

"Dudas razonables" en el Arteria Campos Elíseos de Bilbao

Se levanta despacio de la mesa y se dirige donde la jurado número cuatro ha  caído destrozada. La señora sigue llorando en una soledad helada que inunda la sala. Despacio, suavemente, la maestra se va acercando, cada paso que da, cada metro que avanza, el ambiente se torna más cálido. El frío helador se rompe y deja pasar el amor que surge del fondo del ser humano, de cualquier ser humano, despacio la mira y le dice:

Es muy complicado. Es muy complicado dejar los sentimientos a parte, Intentar ser objetivo. Verlo sin el velo de nuestros propios fantasmas. La verdad no es monopolio de nadie, está repartida, muy repartida y todos tienen un ápice de ella...


Poco a poco la vida vuelve a la sala, cada jurado retoma, muy lentamente su actividad. Desde el centro de la mesa, el jurado número uno, el que hace las labores de presidente, se levanta y empieza a hablar. Ha mantenido su voto de culpabilidad desde el principio, pero no ha dado muchas razones. Ha sido inmune a los argumentos que hasta entonces han sembrado dudas razonables en el resto de los compañeros que conforman el jurado de este juicio por asesinato en primer grado. Para él es claro, hay una testigo visual de lo vio todo y que conocía a la víctima y a su hijo, el asesino...




El próximo sábado, aquel que se acerque al teatro Arteria Campos Elíseos de Bilbao podrá ser testigo directo, en primera persona, de esta deliberación de un jurado popular. Podrá vivir  como las certezas iniciales se van sembrando de dudas razonables y como cada miembro de ese jurado se va desnudando, dejando entrever, tras esa máscara que lo esconde cada día, que le da la normalidad que le vale de escudo en su lucha diaria y en su relación con los demás. Va dejado entrever sus circunstancias, sus secretos, sus  costumbres, sus razones... mostrando al público lo difícil que es se objetivo y neutral, lo complicado que  es tomar una posición aséptica sobre cualquier cuestión, por ejemplo, para hacer justicia. Eso es "Dudas razonables" el nuevo trabajo de Banarte Antzrki Taldea  inspirado en el guión para TV "Twelve Angry Men" ("Doce hombres sin piedad" o "Doce hombres en pugna" (como dicen en América)) que Reginald Rose escribió en 1954 y que el cine hizo mítico. Llevado a los escenarios, platos y pantallas en multitud de ocasiones... una de ellas aquel estudio 1 de TVE que está en la memoria de todos los que hemos cruzado la barrera de los 40.  

Ya están las entradas a la venta...  ya las podéis comprar en la taquilla del teatro o en internet  (pincha aquí)





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